Almas solidarias y la solidaridad entre los propios habitantes hacen posible la comida diaria en el cerro San Pedro.

“Ayúdanos a ayudar”. Un cartel con esa frase clavado en un palo, en uno de los barrios más pobres de Chimbote, en el cerro San Pedro, revela el “secreto” de la sobrevivencia de los habitantes de esa zona en más de tres meses de cuarentena y cero ingresos económicos: pura solidaridad.

En la cima del cerro San Pedro, la gente sobrevive como puede. Allí, se encuentran instaladas 45 ollas comunitarias. Sin embargo, a la fecha solo funcionan 21, gracias al apoyo de algunas almas solidarias y de la organización de los propios vecinos.

El Gobierno peruano decretó estado de emergencia nacional hasta el 30 de junio debido a la pandemia de la COVID-19. Por lo tanto, los comedores populares han dejado de funcionar y aún no se han reactivado.

Ante este panorama, el ingenio de las madres de la periferia de Chimbote, en lo más alto del cerro San Pedro, no ha tardado en aparecer y desde la primera semana de cuarentena conformaron ollas comunes.

Con ollas grandes y la leña como combustible, estas madres preparan la alimentación del día. “El menú de hoy es huevo frito con menestra”, dice Carmen, cocinera de la primera olla común instalada en el asentamiento humano Jesús de Nazareth.

Doña Carmen prepara el menú del día para alrededor de 55 familias de este sector, hoy, con suerte tuvo insumos suficientes.

Son los propios vecinos los protagonistas de estas ollas comunitarias, y se han organizado para sobrevivir al hambre ocasionado por el estado de emergencia nacional. Muchos de ellos no han recibido ningún bono económico del Estado y menos alguna canasta de víveres de la municipalidad provincial.

Algunos se han quedado sin trabajo. Sin embargo, cada familia dona los pocos víveres que tiene en casa. Unos dan arroz, otros azúcares, otras verduras; todo lo agrupan en una sola olla común y sale para el menú del día.

Otras veces les queda salir a los mercados y pedir ayuda para no quedarse sin comer ese día, y es que la indiferencia de las autoridades ancashinas ha sido enorme en esta cuarentena para los pueblos marginales.

Si usted desea realizar donaciones y apoyar a combatir el hambre en esta zona del cerro San Pedro, se puede comunicar al número 975995546.

(Redacción El Ferrol)


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