Acciones buscarán promover la adecuada alimentación, prevención y reducción de la anemia.

Personal de salud supervisó cinco localidades y no se encontró ningún caso de esta enfermedad.

Como respuesta a casos de malaria reportados las últimas semanas en Tumbes y todo el norte del país, la Red de Salud Pacífico Norte, a través de la Unidad de Salud Ambiental, visitó cinco localidades del valle Santa para realizar acciones de vigilancia y de control del vector de la malaria, Anopheles sp.

Las localidades inspeccionadas fueron Puerto Santa, Santa, Tambo Real, Alto Perú y Rinconada. En todas ellas se inspeccionaron sembríos de arroz, charcos de agua y viviendas aledañas, lugares en donde suele albergarse el mosquito Anopheles.

La supervisión se dio con el fin de controlar y prevenir los casos de malaria.

La encargada del Puesto de Salud Alto Perú, Licelith Rosales, manifestó que la población de zancudos adultos ha disminuido, pero que siempre en esta época su presencia es notoria. 

En las vigilancias no ubican al vector en las viviendas y que por lo general su presencia siempre es en el campo; y ante cualquier movimiento en las siembras estos (mosquitos) acuden a las viviendas causando malestar en la población, pero hasta la fecha no se han reportado ningún caso en su jurisdicción.

El responsable de Vigilancia y Control de Vectores, Iván Siche Valle, declaró que están fortaleciendo las actividades preventivas y promocionales para sensibilizar a la población en general, como también a los migrantes extranjeros, y que todos acudan a un establecimiento de salud ante la aparición de algún síntoma como: fiebre, dolor de cabeza y escalofríos. Además, recomendó a los pobladores a tener sus depósitos bien tapados y con su tratamiento químico para evitar que se infesten por el vector.

En la visita a estas localidades no se presenció la incidencia de esta afección, pero los miembros de la Unidad de Salud Ambiental se mantendrán alerta y continuarán capacitando e informando a la población.

SÍNTOMAS DE LA MALARIA

La malaria, conocida también por el nombre de Paludismo, es una enfermedad causada por un parásito del género Plasmodium, el vector de esta enfermedad es el mosquito Anopheles.

La fiebre es el síntoma de la malaria por excelencia y el más frecuente. Aunque no viene sola, ya que suele acompañarse de escalofríos, tiritonas, sudoración, cefaleas y dolores generalizados. Otros síntomas que pueden aparecer son vómitos y diarrea.

(Nota de prensa)

Personal de salud del distrito examina calidad de agua que se bebe en anexos.

Un estudio realizado por el Centro de Salud de Nepeña arrojó que, debido a una alimentación deficiente, más de 300 niños menores de 5 años sufren anemia. Este grupo infantil está focalizado desde Huacatambo hasta Motocachi.

“El problema es la mala práctica en la alimentación. Por ejemplo, por acá llega gente de la sierra, y a estas personas más les interesa que su hijo esté gordo. Un niño gordito no quiere decir que esté bien nutrido. Claro, lo alimentan con más papa, camote, yuca, arroz, pero no le dan la suficiente proteína que el niño necesita para crecer”, explicó Doris Seminario Mendo, enfermera del Centro de Salud Nepeña.

Explicó que algunas familias, en su desconocimiento sobre una alimentación saludable, deciden vender las gallinas, cuyes y huevos, alimentos ricos en proteínas. “Pero otras, simplemente, no alimentan bien a sus hijos porque no cuentan con recursos económicos para surtir la canasta familiar”, comentó Seminario Mendo.

Un equipo de profesionales de la salud (una obstetriz, un odontólogo, una enfermera y un médico) se encargan de visitar dos veces por semana cada sector de Nepeña, entre ellos, Cerro Blanco, San José, Nepeña Rural y Motocahi, con el fin de brindar los micronutrientes que las madres deberán dar a sus hijos.

“Las chispitas y el sulfato ferroso contienen vitamina A y B; ácido fólico, hierro y zinc. Y ayudan a que el niño crezca sano y fuerte. Aunque algunas madres no les dan a sus hijos porque no saben el uso correcto, nosotros les enseñamos cómo hacerlo”, añadió la enfermera.

Por estos días, el personal de salud extrae muestras del agua potable que consume la población de los diferentes anexos de Nepeña. “Ahora estamos dirigiéndonos a Huacatambo con el inspector sanitario para verificar si el agua cuenta con una buena cantidad de cloro, porque muchas veces tiene parásitos y la parasitosis y la anemia van de la mano”, puntualizó la especialista.

En el distrito de Nepeña habitan unas 6 mil personas, de estas, unos 500 son niños menores de 5 años.

(Moisés Serquén)