Descarta presiones políticas en casos que involucran a suspendido presidente regional.
“Pueden hablar lo que quieran, hay libertad de expresión, derecho a ‘pataleo’, etcétera. Al Poder Judicial solo le preocupa que se respeten los derechos fundamentales de las personas, nada más”. Así de tajante fueron las expresiones del presidente del Poder Judicial, Enrique Mendoza, quien hoy descartó que en su institución exista algún tipo de presión política para encarcelar y sentenciar al suspendido presidente regional de Áncash, César Álvarez Aguilar.
Esto tras las recientes declaraciones de algunos miembros de la familia Álvarez, quienes aseguraron que existe presión política hacia ese poder del Estado para supuestamente perjudicar a la autoridad regional.
Días atrás se anunció prisión preventiva de 18 meses a César Álvarez para ahondar en las investigaciones que se le siguen por el caso La Centralita, local que funcionaba en Chimbote y que habría servido para las acciones ilícitas de una presunta mafia liderada por la polémica autoridad regional.
El suspendido presidente regional también es acusado de ser el presunto autor intelectual del asesinato del exconsejero regional de Áncash y opositor político, Ezequiel Nolasco, y por este caso se encuentra recluido en Lima.
(Con datos de Andina)