Este incidente se produjo al instalar la mesa de sufragio.
En la mesa de sufragio nº. 003414 del centro de votación, instituto Carlos Salazar Romero, se encontró siete cédulas de votación rayadas. Los trazos estaban debajo de las casillas dónde los electores debían de marcar para elegir al candidato de su preferencia.
El incidente fue causado por una personera al hacer una línea tenue en las cédulas. Los miembros de mesa fueron quienes se percataron y avisaron de lo sucedido al personal de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) y al Jurado Nacional de Elecciones (JNE).
Finalmente se expulsó del local de votación a la personera, y los miembros del JNE rompieron las cédulas marcadas y las reemplazaron por otras en blanco.
Este hecho lo denunció el candidato Juan Carlos Morillo, quien se disputa la gobernación regional de Áncash por el partido político Somos Perú, a las 10.40 a.m., después de haber emitido su voto en el centro educativo José Olaya Balandra.
“Han encontrado cédulas con el símbolo del maíz, aquí hay fraude, hay que jugar limpio, este problema ya se informó a la autoridad electoral, lo mismo pasa en Yungay y Caraz, hay índices que van a querer hacer fraude”, sentenció Juan Carlos Morillo Ulloa.
Responde la ODPE
Según el jefe de la Oficina Descentralizada de Procesos Electorales Santa, Marco Antonio Ramírez, el personal encargado del local de votación le informó que fue una línea cualquiera y se hizo involuntariamente.
"En ese momento los miembros de mesa actuaron de acuerdo a ley y expulsaron a ese personero legal (…). Por supuesto que sí (es un delito) y tendría que intervenir la policía y la fiscalía que están en cada uno de los locales de votación; no me han mencionado si han comunicado al Ministerio Público, pero se levantará un acta”, manifestó.
Resumen de la jornada electoral
La jornada para la Segunda Elección Regional 2018 y el Referéndum 2018 comenzó con retraso en la provincia del Santa, en particular en el distrito de Chimbote, y se tuvo que pagar a un ciudadano de la cola para instalar una mesa.
En el colegio Inmaculada de la Merced, por ejemplo, uno de los centros de votación más grandes de la provincia con 16 538 electores, a las 9.25 a. m. tenía aún dos mesas de sufragio sin instalar: hablamos de la n.° 002612 y la n.° 002577. Ambas mesas tenían en conjunto 300 electores y ninguno de los señores de la fila no quisieron asumir a pesar de que se les advertía de la multa.
A las 10 de la mañana, las dos mesas ya habían sido instaladas, pero en la n.° 0022577 fue necesario hacer una bolsa de dinero entre los electores de la cola para pagarle a uno de ellos y que asuma como miembro de mesa. Se trató del taxista Pedro Severino Dulce Falcón, quien exigió su ganancia del día para poder quedarse como tercer miembro de mesa, junto a los dos miembros titulares.
En el Colegio José Olaya, el número de electores fue de 7200, con un total de 24 mesas. La primera mesa instalada fue a las 7.32 a. m. y el inicio de votación fue a las 8.00 a. m. Sin embargo, la última mesa se instaló recién a las 9.19 por la ausencia de miembros de mesa y tuvo que asumir uno de la cola.
En el colegio Pedro Ruiz Gallo también se reportó que la mesa n.° 2705 no tuvo miembros de mesa hasta las 10.30 a. m.
(Redacción El Ferrol)