Fuertes precipitaciones pluviales ocasionaron el derrumbe de un cerro en el distrito de Pamparomás, dificultando el tránsito.
Dieciséis caseríos de la subcuenca del río Loco, en el distrito de Pamparomás, región Áncash, corren el riesgo de quedar incomunicados. Las lluvias torrenciales registradas el último sábado han provocado daños en distintos puntos de la principal carretera que los conecta. El tránsito vehicular por la zona es restringido.
De acuerdo al Servicio para el Desarrollo Integral Rural (Sedir), las precipitaciones son tan intensas que ocasionaron la activación de varias quebradas y el derrumbe de parte de un cerro a la altura del caserío de Capan, cerca al centro poblado de Pichiu, en el distrito de Pamparomás.
La carretera afectada une a los caseríos del distrito de Pamparomás con el distrito de Moro, en la provincia del Santa, y tiene más de 20 años de antigüedad. Es una de las vías que comunica a la sierra y costa de esta parte del país.
Los pobladores temen quedarse incomunicados por un bloqueo de la vía. “Actualmente, el camino está muy peligroso por la fuerte lluvia. Hay mucho temor de parte de los pobladores”, advirtió Liberato Torre Albino, responsable de Sedir en la zona sierra.
Las lluvias también afectaron los cultivos de maíz en el sector. Los agricultores mencionan que las precipitaciones demoraban hasta inicios de año, pero ahora se han vuelto muy intensas, a tal punto que los ríos se ven bastante cargados.
(Redacción El Ferrol)