Denuncian incumplimiento de pacto colectivo y exigen rendición de cuentas a la diócesis. La administradora niega todos los cargos.
Los trabajadores sindicalizados del Vivero Forestal de Chimbote realizaron hoy un paro de 24 horas demandando el respeto a un pacto colectivo y la rendición de cuentas del dinero que ingresa a este establecimiento. La medida de fuerza se desarrolló en contra de la Diócesis de Chimbote, entidad que administra el vivero.
Por la mañana, un grupo de trabajadores realizó un plantón en las puertas del vivero, portando carteles que decían: “No al abuso y prepotencia” o “Los acuerdos se respetan”. Al mediodía, repitieron esta acción en el frontis de la diócesis, situado en el jirón Ladislao Espinar 456.
“Queremos dialogar y llegar a acuerdos. Enviamos documentos desde febrero. Estamos ya junio y no tenemos ninguna respuesta. Invocamos al obispo (Ángel Zapata Bances) que queremos dialogar. Nombró una comisión que hasta el momento no fija una fecha para conversar”, manifestó el secretario general del Sindicato Único de Trabajadores del Vivero Forestal de Chimbote (Sutravif- DCH), Andrés Zegarra.
El dirigente informó que su primera demanda es la rendición de cuentas por parte de la Diócesis de Chimbote respecto a los 27 años que administra el vivero. “Con un documento, hemos pedido el informe económico. Tenemos ingresos en todos los aspectos, los juegos, los paseos y ahora la feria, pero no hay ninguna respuesta”, señaló.
Como sindicato, añadió, han pedido fiscalizar la Feria de Integración San Pedrito, pero en respuesta han sido marginados y se les ha impedido participar.
Otra demanda es el cumplimiento de acuerdos pactados, como la rotación del personal. “Ya había un acuerdo para que los compañeros que trabajan en (el área de) Reforestación se les cambie en una semana, pero ya van más de tres meses y no se da lo acordado. Por incumplimiento de esto y muchas cosas, hemos hecho este paro”, afirmó.
RESPONDE EL VIVERO
La administradora del Vivero Forestal, Gisela Benites Pacherres, negó la versión de los trabajadores. Aclaró que la huelga acatada respondía a una plataforma de tres puntos: el cambio del horario laboral, el pago de la escolaridad y el supuesto incumplimiento de pactos colectivos.
Respecto al primer punto, dijo que 9 trabajadores del área de Reforestación piden descansar el sábado desde el mediodía y el domingo, algo que la administración no puede aceptar porque son los días de mayor afluencia de público. Precisó que ese personal descansa el martes o el miércoles, y el caso ya fue denunciado a la Sunafil, que no encontró infracción alguna.
Sobre el pago de escolaridad, Gisela Benites dijo que se cancela ese concepto a todos los trabajadores con hijos y tienen las boletas de pago para demostrarlo. En cuanto al pacto colectivo, dijo que es del año 2024, y recién van a entrar a la etapa de negociación. “El 25 nos notifican, pero a la par ya están iniciando una paralización; la verdad que no entendemos”, comentó.
La administradora también respondió a la supuesta falta de rendición de cuentas. Dijo que no podía responder por 27 años de administración del vivero, porque ella recién ingresó en setiembre de 2023 y que todo su trabajo es supervisado por la Diócesis de Chimbote.
Finalmente, negó la falta de comunicación con los trabajadores. Mencionó que este jueves fueron citados en el Ministerio de Trabajo. “El diálogo existe, pero no se puede llegar a una comunicación efectiva si ellos no entienden que se debe dar atención los días más álgidos de la semana que son sábado y domingo”, apuntó.
(Redacción El Ferrol)
