Descubrimiento permitirá, en el futuro, diagnosticar el mal antes de que presente síntomas.

Dos científicas chimbotanas descubrieron una molécula que hace posible la detección precoz del cáncer gástrico en los seres humanos. El hallazgo permitirá que en el futuro los médicos diagnostiquen el terrible mal tan solo con una muestra de sangre y mucho antes de que aparezcan los síntomas.

El descubrimiento es resultado de la investigación desarrollada por las tesistas Emely Gonzales Gómez y Vania Cedrón Maguiña, alumnas de la Escuela de Biotecnología de la Universidad Nacional del Santa. Ambas egresaron en 2015 y pertenecen a la primera promoción de esa carrera en la universidad santeña.

Las futuras biotecnólogas presentaron la tesis denominada “Nivel de expresión relativa del microARN circulante miR-21 como biomarcador asociado al cáncer gástrico en la zona norte del Perú”. El objetivo era saber si la molécula mirR-21 podría determinar si alguien tiene cáncer gástrico o no. El resultado fue positivo.

A través de su investigación, las tesistas demostraron que miR-21, un tipo más pequeño de ARN (ácido ribonucléico), puede funcionar como un biomarcador molecular, el cual es diferente en un paciente con cáncer. Para observar ese biomarcador, antes se debe extraer una muestra de sangre endovenosa a la persona.  

“Nuestro estudio valida un diagnóstico que permite la detección del cáncer gástrico con un método no invasivo. Es importante porque con una muestra de plasma, obtenida de un tubo con 6 mililitros de sangre, podemos detectar de manera temprana, lo que permite un tratamiento oportuno y la supervivencia del paciente”, explicó Vania Cedrón.

El cáncer de estómago, en el Perú, es la segunda causa de mortalidad por cáncer en varones y la tercera en mujeres. Su detección es posible solo con endoscopías o radiografías con contraste o tomografías. Además, no presenta síntomas en sus primeras etapas.

“Se necesita este tipo de estudios en el país para aumentar la calidad de vida de los pacientes”, comentó Emely Gonzales. Vania Cerdán señaló que deberá haber más investigaciones que confirmen sus resultados con una mayor cantidad de muestras, para validar la metodología en etapa clínica.

El proyecto de tesis de Vania y Emely tuvo un costo de S/ 12 000 y fue cubierto por la UNS, pues fue uno de los ganadores del concurso lanzado en mayo de 2019 para financiar esas investigaciones. Vania y Emely sustentarán sus tesis a más tardar el próximo mes.

(Redacción El Ferrol)

 


Sidebar 1